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Asturias experimenta la reducción del paro más importante desde 2008
- 01 de julio de 2021
- 2 min
Se reitera la importancia de intensificar y hacer más sólida la velocidad de mejora económica y de empleo, pues aún son muchos lo retos pendientes hasta recuperar la situación previa a la pandemia.
Asturias ha experimentado en el mes de junio la reducción de paro más importante desde 2008, tanto en términos absolutos como relativos. El número de parados en junio, 72.359, ha disminuido en – 7.582 parados, un -9,5 % respecto del mes anterior, y un -10,7 % respecto de junio del año pasado.
La disminución del paro registrado se produce de forma intensa en todos los sectores, desde los servicios, con casi 5.500 parados menos (-9,52%) que el mes pasado, hasta los parados sin empleo anterior, con 978 personas menos, pasando por la agricultura (-196), la industria (-538) y la construcción (-383). La disminución interanual es también muy importante, con disminuciones próximas al 20 % en la industria y la construcción.
La evolución mensual de la afiliación a la Seguridad Social también es positiva en Asturias, con un incremento de 3.864 afiliados en junio (1,1 %), incremento que se produce tanto en el régimen general como en autónomos. Comparando con junio del año pasado también se incrementa el número de afiliados (+13.301, un 3,8%). La evolución en España es similar, con un importante crecimiento mensual de 233 mil trabajadores, y un aumento de afiliación interanual algo superior al asturiano en términos porcentuales (+4,7 %).
La contratación en Asturias aumenta en mayo, totalizando 29.754 contratos (25,323 %), con un importante incremento interanual tanto de la contratación temporal (+60 %), como indefinida (+43%).
Nos encontramos ante datos positivos que refuerzan la tendencia de los meses pasados, pero todavía lejos de los datos de paro y afiliación previos a la pandemia, por lo que es preciso que persista la tendencia positiva.
Se empieza a notar de un modo mas consolidado los efectos positivos de la evolución epidemiológica ligada a la evolución de la vacunación, por lo que es esencial acelerar en la medida de los posible este proceso.
Si no se debe bajar la guardia en el aspecto epidemiológico, tampoco en el económico. No se debe olvidar que los datos positivos se producen en unos meses generalmente buenos, y en comparación con unos datos de afiliación y paro extremadamente negativos.
Se reitera la importancia de intensificar y hacer más sólida la velocidad de mejora económica y de empleo, pues aún son muchos lo retos pendientes hasta recuperar la situación previa a la pandemia.
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